Un hecho insólito ocurrió este viernes en la ciudad de Avellaneda, en Argentina, cuando un camión de pronto se hundió en la calle junto a todas las cervezas que cargaba desde la Cervecería Quilmes.
“Se movió todo, empezó a corcovear y el camión se fue de costado. Cayó la carga completa. Menos mal que no venía nadie por la derecha porque si no lo mataba. Un auto, alguien en bicicleta o cruzando. Los vecinos dicen que pasa un entubado debajo de la calle Rivadavia y que hubo otros pozos que se formaron pero nunca esto”, dijo Nicolás Di Tomasso, quien manejaba el vehículo, a Clarín.
La carga completa era de 1.200 cajones de cerveza (cada cajón trae 12 botellas); es decir, 14.400 botellas.
Según un policía que acudió a la emergencia, muchas cajas se rompieron y las que se salvaron, la mayoría, fueron saqueadas por la gente. “No se pudo hacer nada. Parecían pirañas. Se pasaron la información y llegaron para llevarse lo que podían”, contó.