Cada vez es más habitual ver circular por las calles de distintas ciudades del país taxis colectivos silenciosos, modernos y ecológicos, reconocibles por sus distintivos colores blanco y verde. Se trata de los vehículos eléctricos impulsados por el programa Mi Taxi Eléctrico, una iniciativa que ya está transformando la vida de conductores y usuarios en comunas de las regiones del Maule y O’Higgins.
Este cambio no solo implica la sustitución de vehículos a combustión por unidades eléctricas, sino también una modernización integral que considera infraestructura de carga domiciliaria segura, fiscalizada y adaptada a las necesidades del usuario. Desde 2021, el programa ha crecido sostenidamente en ambas regiones, apoyado por el Ministerio de Energía, la Agencia de Sostenibilidad Energética y los gobiernos regionales.
Maule: pionero en electromovilidad urbana
En la Región del Maule, el primer taxi colectivo eléctrico comenzó a circular en Talca en octubre de 2021, como parte de la Línea 4, gracias al programa «Renueva Tu Micro, Renueva Tu Colectivo». Posteriormente, se sumaron otras iniciativas como el concurso “+Transporte Eléctrico”, que ha cofinanciado la adquisición de nuevos vehículos y sistemas de carga, especialmente en ciudades como Curicó, donde el impacto ha sido visible con la incorporación de una nueva flota verde a las calles.
Estos programas no solo buscan reducir las emisiones contaminantes, sino descentralizar la electromovilidad, promoviendo su adopción fuera de la Región Metropolitana, con un enfoque regional inclusivo y sostenible.
O’Higgins: infraestructura segura y apoyo técnico para conductores
En la Región de O’Higgins, el programa también ha tenido un fuerte despliegue, beneficiando a colectiveros de comunas como Rancagua, Mostazal, Quinta de Tilcoco, Chimbarongo, Nancagua, San Fernando y Santa Cruz, entre otras. Cada uno de los vehículos entregados incluye la instalación de un cargador semi-rápido domiciliario, diseñado para operar de forma segura durante la noche mediante controles térmicos, eléctricos y de seguridad.
“Nuestro programa va más allá de la entrega de autos eléctricos. Garantizamos un sistema de carga domiciliaria que permita control de consumo, empalmes diferenciados y facturación independiente”, destacó el Seremi de Energía de O’Higgins, Claudio Martínez Molina, quien recalcó que se está construyendo “un ecosistema de movilidad eficiente y accesible que mejora la vida cotidiana”.
Desde la Seremi de Transportes y Telecomunicaciones de O’Higgins, Flavia González Urzúa también subrayó el carácter transformador de la iniciativa:
“Estamos comprometidos con una movilidad más sustentable. Visitamos a los beneficiarios del programa para asegurar que sus cargadores funcionen adecuadamente y que cuenten con apoyo técnico constante. Esto no solo mejora el transporte, también protege el medio ambiente”.
Fiscalización y crecimiento de la red de carga
La Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) ha jugado un rol clave en asegurar el correcto funcionamiento de la infraestructura de carga. Según el director regional de la SEC en O’Higgins, Felipe Lerzundi Rivas, se han fiscalizado cargadores en Machalí y Rancagua, verificando que cumplan con la normativa vigente.
Desde 2022, se han declarado en la región de O’Higgins 18 instalaciones públicas con 32 puntos de carga, 62 instalaciones privadas y 3 asociadas a electroterminales del transporte mayor. Toda infraestructura, pública o privada, debe ser declarada ante la SEC mediante el Trámite Eléctrico N°6 (TE6) por un instalador autorizado.
Un cambio que mejora vidas
El impacto en la rutina diaria de los colectiveros es evidente. Hoy, al finalizar su jornada, ya no deben acudir a estaciones de servicio. En su lugar, regresan a sus hogares y cargan sus vehículos de manera segura y económica, optimizando sus tiempos y costos.
Identidad visual y normativa
Los colectivos eléctricos del programa Mi Taxi Eléctrico en ambas regiones están regidos por el Decreto Supremo 212, que establece un esquema de color blanco y verde para distinguirlos de los taxis urbanos tradicionales. En el caso de taxis eléctricos tipo sedán, se permite carrocería negra con techo verde y numeración en verde, mientras que los taxis de turismo tienen un diseño blanco con puertas y capó en verde o azul.