Los hemos visto en un automóvil que circula por nuestras ciudades, un explorador que capta cada rincón
de un volcán, una bicicleta o incluso una moto de nieve; pero nunca habíamos visto una de las cámaras de Google Maps sobre un camello.
Así se las ingenió Google para llevarnos al Desierto Liwa, una de las zonas más inhóspitas del planeta y que solo puede ser explorada con la ayuda de un experimentado beduino y su confiable dromedario.
El Desierto Liwa no solo registra las temperaturas más altas del planeta, sino que su terreno es también casi imposible de navegar sin la ayuda de un experto local.
En este desierto se sitúa también el oásis más grande del planeta y puedes visitarlo a través de este vinculo https://www.google.com/maps/views/streetview/liwa-desert?gl=us
