Los Municipios no tienen competencias para permitir bingos, donar premios o prestar alguna dependencia municipal para este tipo de eventos. Así quedó estipulado en la resolución número 31.241 publicada el pasado 22 de abril por la Contraloría General de la República.
El dictamen basado a la respuesta para la Municipalidad de El Quisco. Según el organismo, los juegos de azar “sólo pueden ser explotados a través de una autorización legal expresa y por quien esté habilitado para ello, por lo que no es procedente que los municipios permitan o faciliten los medios necesarios para su realización”.
Sin embargo, el mismo texto añade que cuando se trate de obras de beneficencia “cuyo objeto sea la educación, la caridad o la asistencia social”, podrán solicitar el permiso a la Presidenta de la República, a través de la Intendencia en cada Región del país.
La respuesta de la Contraloría no ha gustado a algunos, como el concejal de Ñuñoa, Guido Benavides, quien dijo que esta normativa “atenta contra la solidaridad del barrio”. “Es una normativa absurda”, recalcó y añadió que pedirán que se cambie la regla.