Un trágico tiroteo ocurrido este martes en un colegio de la ciudad austríaca de Graz ha dejado al menos diez personas fallecidas, entre ellas siete alumnos, un adulto, el supuesto autor del ataque y una víctima aún no identificada, según informaron medios locales citando a la alcaldesa de la ciudad, Elke Kahr. Además, otras 28 personas se encuentran hospitalizadas, cuatro de ellas en estado crítico.
El ataque se registró alrededor de las 10:00 horas (hora local) en el instituto BORG Dreierschützengasse, ubicado en la segunda ciudad más grande de Austria. Tras la alerta, las fuerzas especiales, incluido el equipo de élite Cobra, fueron desplegadas en el lugar junto a un helicóptero y más de 150 paramédicos de la Cruz Roja, además de personal especializado en intervención en crisis.
Según información preliminar proporcionada por la policía y difundida por la agencia APA y medios como ORF y Kronen Zeitung, el presunto autor del ataque sería un estudiante del mismo colegio, menor de edad, que fue hallado sin vida en los baños del establecimiento. Las primeras hipótesis apuntan a un suicidio y a que el atacante habría sido víctima de acoso escolar.
El hecho provocó una masiva evacuación del recinto educativo, mientras varios estudiantes y docentes buscaron refugio en las aulas. Una profesora relató haber permanecido atrincherada con sus alumnos tras escuchar una serie de disparos. Testigos señalan que se oyeron al menos 20 detonaciones durante el ataque.
La policía mantiene acordonada la zona y ha solicitado al público evitar el área mientras se continúa con la inspección del edificio. Paralelamente, algunos de los heridos están recibiendo atención médica en la cercana residencia Helmut List.
El canciller de Austria, Christian Stocker, y otros altos funcionarios se trasladarán hasta Graz para seguir de cerca la situación. La tragedia ocurre a pocos días de conmemorarse el décimo aniversario de la llamada «masacre de Graz», ocurrida en junio de 2015, cuando tres personas murieron atropelladas en el centro de la ciudad, un episodio aún presente en la memoria colectiva de los habitantes.
Austria, país miembro de la Unión Europea con más de nueve millones de habitantes, es reconocido por sus bajos índices de violencia y figura entre los diez países más seguros del mundo según el Global Peace Index. Por ello, este nuevo ataque ha conmocionado a la opinión pública y a las autoridades, que aún investigan las motivaciones del agresor.
