En los últimos años, el Hospital San Juan de Dios de Curicó ha enfrentado una serie de demandas civiles por negligencia médica, las cuales han derivado en condenas judiciales que superan los $570 millones en indemnizaciones por daño moral a familiares y pacientes afectados.
Se trata de fallos dictados entre 2023 y 2025 por el Segundo Juzgado de Letras de Curicó, varios de los cuales han sido ratificados por la Corte de Apelaciones de Talca, mientras otros aún se encuentran bajo revisión en la Corte Suprema. Los casos dan cuenta de una preocupante secuencia de errores clínicos, diagnósticos tardíos y omisiones graves en los protocolos de atención, que han tenido consecuencias fatales o de alto impacto emocional.
Cuatro historias que reflejan un mismo patrón
- Alan Becerra: negligencia y falta de resguardo tras una muerte evitable
Uno de los casos más antiguos es el de Alan Abraham Becerra Gajardo, un menor que falleció en agosto de 2015 mientras permanecía hospitalizado. El tribunal acreditó que su muerte, causada por un shock anafiláctico, no fue debidamente investigada ni notificada a las autoridades competentes. El cuerpo fue entregado a la familia sin autopsia ni preservación del sitio del suceso, lo que llevó a la Policía de Investigaciones a intervenir durante el velorio. La justicia consideró que el hospital incurrió en una grave falta de servicio y negligencia institucional, ordenando el pago de $90 millones al padre del menor. La sentencia fue confirmada por la Corte de Apelaciones de Talca en mayo de 2025.
2. Seis hijos obtienen justicia tras una atención cuestionada:
Un segundo fallo emblemático es el relacionado con la muerte de Elba Solorza Solorza, cuyo deceso también fue atribuido a una atención médica deficiente. La Corte de Talca confirmó en febrero de 2025 una sentencia que condena al hospital a pagar $260 millones a sus seis hijos. El testimonio del médico perito Dr. Luis Ravanal, quien cuestionó las decisiones clínicas del personal, fue clave para establecer la responsabilidad del centro asistencial. Aunque el caso fue apelado a la Corte Suprema, la sentencia de segunda instancia reafirmó que el hospital incurrió en falta de servicio médico.
3. Una alta médica que terminó en tragedia:
En otro caso, la justicia acogió una demanda por la muerte de María Yolanda Cifuentes Garrido, ocurrida en marzo de 2020. La paciente fue dada de alta tras consultar con síntomas respiratorios graves y regresó horas después en estado crítico, falleciendo al día siguiente. El tribunal determinó que existió una omisión de exámenes básicos y una evaluación negligente, ordenando al hospital indemnizar a sus dos hijos con un total de $110 millones.
4. Dolor abdominal que terminó en quirófano por diagnóstico tardío y manejo inadecuado:
Más recientemente, el fallo favorable a Juan Guillermo Villarroel Rojas cerró este conjunto de condenas. En 2017, ingresó con dolor abdominal agudo, pero fue dado de alta sin estudios clínicos adecuados. Días después, debió ser intervenido de urgencia por una peritonitis aguda en Santiago, producto de un diagnóstico tardío y manejo inadecuado en Curicó. La sentencia le otorgó $40 millones por daño moral, al reconocer las secuelas físicas y emocionales de la experiencia.
El abogado Leonardo Fuentes Quinteros, representante de varias de las familias afectadas, valoró el avance judicial en estas causas. “Estas sentencias confirman que existió una falta de servicio evidente por parte del hospital. No se trató solo de errores puntuales, sino de una falla estructural en el deber de cuidado hacia los pacientes. Las indemnizaciones no reparan el dolor ni devuelven a los seres queridos, pero representan un mínimo acto de justicia”, señaló.
Estos fallos no solo implican una compensación económica para las víctimas, sino que a juicio de los tribunales, evidencian graves deficiencias en el funcionamiento del Hospital de Curicó.
